1/ Si vas a salir por ahí, escoge un lugar original, no masificado, para que disfrutes de la tranquilidad, y no estés en tu metro cuadrado de playa como sardinilla en lata.
España (y el mundo) está llena de lugares donde la vida slow es una realidad, busca en el atlas de casa, (ése que no abres desde 4º de Primaria) y elige destino…
2/ Pon en tu maleta un libro y mejora tu verano en un 23%. Novela, ensayo, aquel libro que te regalaron en navidades y que no has tenido tiempo de empezar, o ése que trocaste en Majaelrayo y que aún espera que lo leas.
3/ El buen rollo llama al buen rollo. Si tu estado de ánimo es alegre, si sonríes y te diriges a la gente de forma amable, está comprobado que recibes lo mismo. Que se lo pregunten al Punset y sus teorías de la felicidad… (Ojo, que con el mal rollo se da la misma regla de tres…)
4/ Consume alimentos frescos, y a ser posible, directos de la Huerta. Viva lo ecológico! Los salmorejos y gazpachos no saben igual si los elaboras con productos transgénicos… una alimentación adecuada hará que tengas más fuerza y digieras mejor. Los deportes de verano harán el resto…
5/ Llévate en la mochila una agenda y apunta ideas, cosas de otras ciudades que te han gustado, pensamientos positivos… seguro que nos son muy útiles en las reuniones de ideas a la vuelta del verano! La escritura es un placer bien barato.
6/ Juega. Ya sea con la familia, con tus hijos, con tu pareja o con tu perro. A las cartas, a hacer castillos de arena, o al «pillaó». El juego estimula la creatividad y la cooperación y te hace sentir bien.
7/ Deja el móvil en casa. Aprovecha los días de descanso para descansar la oreja y liberarla de ondas. Descubre la cantidad de tiempo que tienes sin tele ni WhatsApp… tus minutos se multiplican y tendrás mucho más verano!
8/ Recupera una afición. ¿Te encantaba hacer fotos?, ¿Solías leer cómics de Spiderman?, ¿Pintabas al óleo?, ¿salías a conocer la provincia con un bocata de tortilla?, el verano es un momento perfecto para retomar viejas pasiones.
9/ Quiérete. Mímate un poquito, hazte caso. En todo el año no has caído en lo mucho que vales y en lo necesario que eres en tu entorno. ¡Date cuenta y brinda por ello!
10/ Escribe una carta a mano a alguien. Esa sensación de escribir algo bonito, de no cometer errores y hacer buena caligrafía. El cariño con el que se pone la dirección postal y se echa en un buzón de Correos repintado de amarillo. La ilusión que hace recibir noticias de un amigo del que se reconoce la letra, no tiene precio.
Y si te sobra tiempo…
* Miércoles 11 de julio, a las 18’30h: Taller de Lobos Reciclados, para niños acompañados. Precio: 3€ (socios del Rincón Lento, gratis). 10 plazas.
* Jueves 12 de julio, a las 19’00h: Cine sorpresa en el Rincón lento. Gratis total.
* 2º Concurso de Reciclaje del Rincón Lento: Este año proponemos «customizar» las sillas de insti del Rincón para estrenarlas en septiembre con otro aire. Tienes todo el verano! Participa!